Él también administraba Brandeburgo-Kulmbach en nombre de Alberto Alcibíades, el hijo de su fallecido hermano, Casimiro.
Ella le proporcionó una educación profunda y humanística.
No obstante, la regencia de Brandeburgo-Ansbach fue administrada conjuntamente con los electores reinantes de Sajonia y Brandeburgo, y con el landgrave de Hesse, Felipe I. Emilia fue descrita como sabia, virtuosa y piadosa.
Era una estricta luterana y una opuesta activa al catolicismo en los territorios de su marido y de su hijo.
[1] En sus últimos días se retiró a su sede de viuda.