El legislativo saliente se limitó a reformar la constitución para permitir la constitución de partidos políticos distintos al PAICV y aprobar una ley electoral que instauraba un sistema de representación proporcional por listas en cada circunscripción, instaurando además la modalidad del sufragio en el extranjero.
La aprobación de una nueva constitución que institucionalizó el multipartidismo, entre otras modificaciones, correspondió al siguiente legislativo electo.
[4] El líder del MpD, Veiga, asumió como primer ministro el 26 de enero, presidiendo una administración provisional hasta las elecciones presidenciales de febrero, en las que António Mascarenhas Monteiro, candidato del MpD, derrotó a Pereira por un margen aún más amplio.
Aunque al principio el objetivo del PAICG era unificar Cabo Verde con la Guinea-Bisáu en un solo país, finalmente el gobierno caboverdiano encabezado por Aristides Pereira como presidente y Pedro Pires como primer ministro cortó relaciones con el PAICG continental luego del golpe de Estado ocurrido en Guinea-Bisáu en 1980.
Esa misma noche, el primer ministro Pedro Pires anunció el comienzo de la transición hacia el multipartidismo.
El país sería dividido en veintidós circunscripciones, con al menos dos diputados cada una, teniendo para esta elección un máximo de doce en dos distritos (Praia Urbano y Nossa Senhora da Luz).
[13] El derecho a participar en la votación para los caboverdianos residentes en el extranjero se instauró en la ley electoral, y sería consagrado en la constitución posterior.
[4] La campaña del MpD se centró en resaltar los valores de la democracia y los derechos humanos, pero también al cambio económico.
Veiga aprovechó su estancia en Santo Antão, que era la isla más castigada por la represión del régimen, para reunirse con víctimas de abuso policial y compartir sus historias.
Dicho caso, que ya no era atendido por Veiga, había sido llevado a instancias internacionales y se resolvería después de las elecciones.
Pires también declaró que el MpD fue «hábil a la hora de tocar puntos sensibles» y dejó al PAICV con «dificultades para defenderse o emprender el mismo camino».
[4] Aunque reconocida en gran medida como pacífica, la campaña tuvo algunos momentos de tensión y denuncias.
[4] Por la medianoche del 13 de enero, al transmitirse los resultados, Veiga emitió un comunicado de prensa agradeciendo a la población por el resultado, afirmando que no se sorprendía porque desde su fundación el MpD había trabajado para lograr el triunfo, y afirmó que «no es una victoria para el MpD, sino para todo el pueblo caboverdiano».
[4] La noche posterior a la elección, el presidente Aristides Pereira transmitió un mensaje a la nación en la que felicitó al pueblo caboverdiano por la elección pacífica y declaró que el 13 de enero sería recordado como un punto de inflexión en la vida política del país.
El entonces presidente de Portugal, Mário Soares, mantuvo conversaciones telefónicas tanto con Veiga como con Pires, enviando sus felicitaciones a los candidatos electos y a su vez congratulando al liderazgo del PAICV por organizar una elección transparente y haber reconocido la derrota.