Eduardo Invierno

La escuadrilla de interceptores leales al gobierno que confrontó a la escuadrilla rebelde que integraba el biografiado se componía de aviones Gloster Meteor y era tripulada por los tenientes primeros Juan García (volando el I-039, al mando), Mario Luis Olezza (I-077), Osvaldo Rosito (I-090) y el teniente Ernesto Adradas (I-063), todos miembros de la Fuerza Aérea Argentina.[2]​ Posteriormente sirvió en la Segunda Escuadrilla de Patrulleros de la Escuadra Aeronaval N° 2 y más adelante fue destinado a servir en el Grupo Aeronaval del Grupo Naval Antártico.[3]​[7]​ Como director del SIN, Eduardo Invierno tenía mando directo sobre el Grupo de Tareas 3.3 y sus apéndices o subdivisiones.De hecho, alguien lo llamó para recordarle que lo esperaban en el Apostadero Naval de San Fernando para pasear en el yate del jefe naval.Mientras Invierno y su asistente Radice comienzan las "investigaciones" infructuosas, es el propio capitán Invierno quien comienza una telaraña de enajenación de bienes de Fernando Branca en Argentina y Estados Unidos, mediante las oportunas y necesarias firmas del propio Fernando Branca (que ya estaba desaparecido).Todo ese patrimonio se esfumó junto con el paradero del empresario.Tras esto, Quijano desistió en saber nada más con ese caso y ningún abogado en Buenos Aires quiso patrocinar a Blaquier.Se les dictó prisión preventiva a Marta Rodríguez McCormack y el capitán de navío Eduardo Invierno.Pero para ese momento, la relación de McCormack con el Almirante ya había terminado.Devoto tenía intención de averiguar el paradero y la suerte de su suegro, el ex juez Antonio Bettini, quien había sido secuestrado setenta y dos horas antes.Allí se señala que fue recibido y entrevistado por el titular del Servicio de Inteligencia Naval, Capitán Eduardo Osvaldo Invierno.A Jorge Devoto se lo arrojó al mar consciente por su condición de militar.Su cuerpo fue encontrado en estado de descomposición a la vera del río Luján, en Tigre, siendo reconocida posteriormente por su primo Alejandro Agustín Lanusse.Las piezas óseas del esqueleto pesaban exactamente siete kilogramos, encontrándose “prácticamente limpio, sugiriendo claramente que habían intentado borrar su identidad”.Gregorio, hermano del publicista, declaraba en el proceso judicial por la desaparición y asesinato de Holmberg.Ese día en particular se mostró visiblemente alterado porque creía que un Ford Falcon oscuro lo estaba siguiendo.Se buscó simular la escena como un accidente, pero en el cuerpo de la víctima se encontraron visibles y abundantes quemaduras concordantes con el uso ensañado de picana eléctrica.Invierno estuvo en ese destino hasta el primer trimestre de 1982, cuando pasó a retiro.