Diócesis de las Siete Provincias

[6]​ Era una diócesis de retaguardia ya que no contaba con ninguna frontera imperial y no sufrió, así, los pillajes a los que fueron sometidos las provincias galas del norte durante el siglo IV.

Tras la guerra contra los godos, el Imperio acordó un tratado con ellos que les permitió asentarse en el valle del río Garona en el año 418 donde crearon el reino de Tolosa.

Durante las décadas siguientes intentaron conseguir una salida al mar mediterráneo por lo que atacaron Arlés y Narbona aunque fueron rechazados por los romanos.

Son pocos los nombres de vicarios que se conocen y todos ellos, sin excepción pertenecían a la clase ecuestre.

Entre sus comunicaciones y rutas comerciales destacaban las calzadas que se dirigían a Hispania a través de Burdeos (al oeste) o Arlés (al este), la que comunicaba estas dos ciudades a través de Tolosa y la que subía hacia el Rin por el valle del Ródano.

Desde su creación hasta el final del gobierno de Constantino se le llamó diócesis «Viennense».

[18]​ Al frente se encontraba el vicario quien contaba con un equipo compuesto por:[19]​ Además del vicario, también existían otros representantes de la Administración central: Por su situación alejada de la frontera, la diócesis albergaba pocas unidades del ejército imperial y estas, junto a las desplegadas en la vecina diócesis de las Galias, estaban comandadas por el magister equitum per Gallias.

Mapa de la diócesis de las Siete Provincias.