Es el futbolista más laureado en la historia de su país, y también es uno de los cinco futbolistas con más títulos en la historia del fútbol, tanto a nivel internacional como a nivel oficial, con 19 títulos internacionales de 43 títulos oficiales.
[3][4] Daniel Alves debutó como profesional, en 2001, en el Esporte Clube Bahia ganando un Campeonato Baiano y dos Copas do Nordeste; si bien sólo participó en la Copa do Nordeste de 2002.
[5] Un año después se incorporó al Sevilla Fútbol Club, que pagó 500 000 euros por su cesión.
En enero de 2004, el conjunto sevillano lo adquirió en propiedad por unos 850 000 euros.
En agosto de 2007, Daniel pidió al Sevilla que le dejara marchar y crecer como jugador.
[8] Sin embargo, las altas pretensiones económicas del Sevilla frustraron su fichaje por el Chelsea F. C. de la Premier League inglesa, que ofreció 36 millones de euros por él.
[10] Pese a ello, se quedó otro año más en la disciplina nervionense, siendo traspasado finalmente al Fútbol Club Barcelona.
[15] Alves fue un referente en la defensa azulgrana y se consagró como el lateral derecho titular del cuadro catalán.
Es especialmente conocido por sus incorporaciones al ataque, su velocidad, sus asistencias y sus lanzamientos de falta.
[22] Después de tres temporadas irregulares, en verano de 2014, hubo muchos rumores sobre su posible salida del equipo, pero finalmente se quedó.Tras la sanción de la FIFA el Barça intentó renovarle el contrato una temporada más, hasta 2016, cuando ya se pudiera fichar.
[25] A nivel de clubes europeos, Alves lo ha ganado todo, destacando tres Champions League, dos Europa League, seis Ligas de España, tres Copas del Rey y tres Mundiales de Clubes, formando parte del Barça del sextete.
A nivel de selecciones solo le falta un Mundial.
El 6 de febrero marcó su primer gol en su regreso al club, el equipo venció por 4-2 al Atlético de Madrid, dio una asistencia y fue expulsado.
Anteriormente formó parte de la selección brasileña que ganó el mundial sub-20 celebrado en los Emiratos Árabes Unidos en 2003, venciendo en la final a España (1-0).
También disputó la Copa América 2011 celebrada en Argentina, en la que Brasil fue eliminada en cuartos de final por Paraguay.
Tras la declaración, la jueza decretó prisión preventiva sin fianza, basándose en las pruebas forenses (lesiones compatibles con una pelea y líquido seminal),[53] incoherencias de su declaración y el alto riesgo de fuga.
[60][61] El tribunal optó por la pena mínima, porque el acusado «se ha mostrado conforme a indemnizar a la víctima por encima de los parámetros habituales en este tipo de delitos».
Barcelona retiró la condición de «leyenda del club» al futbolista.