Como intelectual, fue considerado libertino, por su actitud irrespetuosa hacia las instituciones religiosas y seculares.
El enfrentamiento continuó en una serie de textos satíricos que sendos escritores cruzaron: Bergerac escribió Contre Soucidas (un anagrama del nombre de D'Assoucy) donde denuncia su ateísmo y Contre un ingrat, ambas dentro de sus Cartas satíricas (donde también se recogen otras contra Paul Scarron, Montefleury, etcétera) e imaginó una vasta obra, L'autre monde, especie de nueva utopía (Cyrano conocía las de Tomás Moro y Tommaso Campanella), en la cual presentó, entre extravagantes fantasías, sus audaces ideas físicas y filosóficas, pero que no llegó a publicar en vida.
Fue muy discutido y controvertido, y considerado, sucesivamente «un mártir libre-pensador» (Paul Lacroix), un «científico incomprendido» (Pierre Jupont, La obra científica de Savinien de Cyrano “Cyrano de Bergerac”, 1907), un «libertino sin arte ni parte» (Lechevre), un «racionalista militante» (Weber) y «pretendido alquimista» (Eugène Canseliet).
Sus obras han sido editadas muchas veces, sobre todo en París, en 1741, en 1851 por M. Leblanc Duvernet, y en 1858 por Paul Lacroix, conocido como El bibliófilo Jacob.
Las siete "Mazarinadas" de Cyrano (atribución que él rechazó en ocasiones) son, para él, una oportunidad para cultivar su inclinación por el panfleto y la sátira, a la vez que, una forma de oponerse a la política financiera del cardenal Mazarino de ideas igualitarias y modernas.
Tragedia en cinco actos y en verso cuyo tema dominante es la mentira, motivo del diálogo entre los dos hombres; los dioses están excluidos, sobre todo en una escena en particular que produjo gran escándalo, y en la cual Sejanus manifiesta su ateísmo: Ces beaux riens qu'on adore, et sans sçavoir pourquoy, Ces alterez du sang des bestes qu'on assomme, Ces Dieux que l'homme a faict, et qui n'ont point faict l'homme, Des plus fermes Estats ce fantasque soustien, Va, va, Térentius, qui les craint, ne craint rien.
Los dos relatos fueron publicados a título póstumo, y después del expurgo realizado por Le Bret.
Madeleine Alcover pone en duda, en su edición, la atribución de este fragmento a Cyrano.
El grupo español de metal neo-clásico, Dark Moor, compuso y dedicó una canción al poeta en su disco homólogo "Dark Moor" bajo el nombre "Cyrano of Bergerac".