Se trata de una curruca frecuente, y localmente abundante, que está muy repartida por toda España.Cría en casi toda Europa, en las Islas Canarias, noroeste de África y Asia occidental.Ejemplos donde estas currucas se desarrollan son los robledales, fresnedas y otras formaciones de planifolios.Durante la primavera se centra básicamente en la captura coleópteros y dípteros, aunque no son estos los únicos insectos que caen presa de este pajarillo.A partir del nacimiento de sus pollos se dedican a recoger infinidad de pequeñas orugas y larvas, aunque también son cebados con cerezas, higos y otros frutos silvestres del tiempo.Presentes en su dieta podrían estar, el saúco, el espino, el aligustre, la rosa silvestre, la zarzamora, la madreselva, el tejo, el acebo, etc., sintiendo especial predilección por todos ellos.[6] La curruca capirotada es un pájaro incansable que se hace notar cantando constantemente y durante todo el año, tanto machos como hembras.En el verano generalmente la hembra adulta va en pequeños grupos acompañada por 3 o 4 jóvenes, y en el invierno las parejas se mantienen unidas.Es entonces cuando se forman grupos de machos en torno a un matorral, entre la maleza, tal vez en las ramas más bajas de un árbol, o simplemente en su hábitat natural, y comienzan a perseguirse entre la vegetación, lanzando sonidos guturales frenéticamente y sin cesar.Para lograr dominar un determinado territorio, la curruca capirotada macho despliega todas sus armas, de tal forma que infla exageradamente el plumaje de su cuerpo, deja caer sus alas, quedando estas colgadas perezosamente como si les pesaran demasiado, mientras tanto, la cola se abre y se cierra, y el macho que se muestra con mayores «cualidades y valentía» consigue así dominar la situación, quedando por tanto dueño de un pequeño territorio.Normalmente es el macho quien elige el lugar de emplazamiento colocando allí dos o tres hierbas secas, aunque es la hembra quien principalmente lo construye.Se localizan escondidos en arbustos u otra maleza, sujetos en ramas débiles y a una altura del suelo que no suele bajar de 80 cm ni subir por encima del 1,70 m. Los polluelos permanecen en el nido durante un periodo de tiempo que oscila en unos 11 y 14 días.Esta curruca realiza dos puestas anuales, criando entre los meses de mayo y julio.Se conoce que poblaciones en Alemania y Austria aumentaron el número de parejas en los años 1980.