Cosa en sí

La cosa en sí (Ding an sich) es un concepto kantiano que alude a la realidad tal y como podría pensarse al margen de cualquier experiencia posible.

A diferencia del fenómeno, la cosa en sí está más allá de todo conocimiento sensible.

La cosa en sí es una limitación del conocimiento y así actúa sobre nuestras representaciones, de manera negativa.

Kant siempre se defendió de la acusación de idealismo absoluto (especialmente en su Refutación del idealismo ), aunque reconoció que el vínculo entre la cosa en sí y el fenómeno, entre la experiencia externa y la experiencia interna, era inexplicable.

[6]​ Inicialmente Fichte abrazó la filosofía kantiana, incluida una cosa en sí, pero el trabajo de Schulze le hizo revisar su posición.

[8]​ En su Crítica de la filosofía kantiana adjunta a El mundo como voluntad y representación (1818), Arthur Schopenhauer coincidió con los críticos en que la manera en que Kant había presentado la cosa en sí era inadmisible, pero consideró que Kant tenía razón al afirmar su existencia y elogió la distinción entre cosa en sí y apariencia como el mayor mérito de Kant.

Postulada como incognoscible, la cosa en sí planteará muchos problemas a la filosofía posterior, que buscará prescindir de este concepto.

La especulación en torno a la cosa en sí o un concepto equivalente es central en la mayoría de las filosofías orientales, ya sea afirmándolo como un absoluto, como el Tao del taoísmo, el Brahman de Vedanta; o negándolo por completo (el vacío del budismo).

Retrato de Immanuel Kant.
Portada de la primera edición de la Crítica de la razón pura .
Retrato de Friedrich Heinrich Jacobi.