La península de Otago es el lugar donde la arqueología ha demostrado el uso real del "Árbol Col" como alimento.
Es ampliamente utilizado como árbol ornamental, tanto en Nueva Zelanda, en la Europa occidental (inclusive en las islas británicas) y la costa noroeste de los Estados Unidos.
[2] Debido a su mejor tolerancia al clima frío que otras monocotiledóneas arbóreas (que alcanzan el tamaño de árboles), esta especie es frecuentemente plantada por personas deseosas de recrear un ambiente tropical y una apariencia exótica en sus patios y jardines.
La subespecie (o variedad) atropurpurea es especialmente notable por su follaje rojo y varios de los cultivares están disponibles en el mercado.
Desde 1987, los árboles col de Nueva Zelanda están siendo afectados por una enfermedad llamada "Muerte súbita" causada por el patógeno Phytoplasma australiense, que provoca la desfoliación casi total del árbol afectado en un plazo de 2 a 12 meses.
[5] Cordyline: nombre genérico que deriva de la palabra griega kordyle que significa "club", en referencia a los tallos subterráneos o agrandamiento de los rizomas.