Cordillera del Cóndor

Considerada por muchos científicos como un ecosistema escasamente explorado, está provisto gracias al apoyo de varios proyectos con reciente información que ha permitido determinar la importancia global de esta región.

En 1993 Alwyn Gentry y sus colegas en un viaje organizado por Conservación Internacional obtuvieron ingreso a las altas cadenas montañosas de arenisca con el apoyo de un helicóptero provisto por el Ejército Ecuatoriano e hicieron colectas por primera vez en las praderas de las bromelias.

Robin Foster y Hamilton Beltrán llevaron a cabo en 1995 inventarios botánicos al lado peruano de la frontera, en un segundo viaje auspiciado por Conservación Internacional.

Las colecciones de orquídeas en la región fueron realizadas en varias ocasiones por Alexander Hirtz y Carlyle Luer.

Estos trabajos se llevan a cabo con la colaboración de la Federación Shuar.

Ejemplar de hormiguerito ornado ( Epinecrophylla ornata ) de la cordillera. Esta región posee una rica avifauna.