Se extiende desde la margen izquierda del río Tambo hasta muy cerca de la frontera entre Perú y Chile.
Solamente el volcán Yucamani conserva casi intacta su forma cónica característica, claramente distinguible desde distancias considerables.
Esta cordillera se distingue por su clima muy seco caracterizado por temperaturas bajas con amplias variaciones entre el día y la noche.
La habitan pocas vicuñas y vizcachas, pero son los únicos lugares en el Perú donde se encuentran los ñandúes o suri.
[1] Cubierta por escasa nieve, la cordillera del Barroso alcanza su mayor altitud en el volcán Tutupaca, con 5.815 metros.