Durante la acción el Constitución actuó como consorte de la La Merced en combate contra el bergantín Santa Clara (José Murature, 5 cañones) y la goleta Chacabuco (Rafael Pittaluga, 5 cañones), que formaban en el flanco norte de la línea porteña.
El bloqueo fue inmediatamente reconocido por los jefes de las estaciones navales extranjeras, limitándose a obtener una prórroga en los seis días de plazo para que los buques extranjeros dejaran balizas interiores y los veinte para abandonar las exteriores.
Si bien el bloqueo no era suficiente para cubrir un frente tan extenso, la situación del gobierno rebelde era crítica.
Finalmente lo que salvaría a la ciudad y lograría el fin del sitio sería el soborno del comandante nacional Coe que bien pagado con 5000 onzas de oro selladas por el gobierno porteño para renunciar "para siempre á la verdadera gloria para arrastrarse durante toda su vida con deshonor é ignominia", en palabras de Paz, el 20 de junio de 1853 entregó la escuadra a sus adversarios, secundado por Luis Cabassa, José María Pinedo y Guillermo Turner, que así volvía a Buenos Aires.
Tras ser reparado el 12 de agosto se arrendó al cónsul estadounidense en Asunción del Paraguay Edward Hopkins.
Durante la lucha recibió un impacto de cañón de a 16 en el palo mayor, otro igual en el mesana y daños en bauprés y máquinas por lo que pasó a repararse en río Luján al mando del sargento mayor Lino Neves.
Ese año perdió su hélice en el río, por lo que pasó a dique y fue rematado en esas condiciones.