Conquista de Gran Canaria

[5]​[6]​ Entre las obras realizadas en Canarias destacan las conocidas como «crónicas de la conquista» (manuscritos Lacunense, Matritense y Ovetense), que según los investigadores serían copias o extractos del siglo XVI de una crónica primitiva.

Poseían una economía basada principalmente en la agricultura cerealista excedentaria, apoyada por una importante actividad ganadera de cabras y ovejas.

Habitaban en cuevas, tanto naturales como artificiales, y construían casas de piedra conformando verdaderos poblados.

[18]​ Según las fuentes históricas, en los momentos previos a la arribada de los conquistadores la isla se hallaba envuelta en conflictos internos.

Tras desembarcar en la isla y lograr que numerosos canarios se convirtieran al cristianismo, los portugueses no pudieron proseguir la conquista por falta de avituallamiento.

[34]​[35]​ Los Reyes Católicos, que se encontraban inmersos por esas fechas en la guerra con Portugal, comenzaron enseguida a preparar la expedición conquistadora.

[42]​ La armada se preparó en Sevilla y en Sanlúcar de Barrameda, juntamente con otra que los reyes destinaron a Guinea bajo el mando del capitán catalán Juanoto Boscá.

[44]​ Según Alfonso de Palencia, el ejército reunido para la conquista ascendía a unos mil trescientos soldados en un primer momento.

Se hallaban también entre la hueste veinte lanzas de la Santa Hermandad, proporcionados directamente por los reyes,[48]​ y algún que otro espingardero.

[52]​ Las armas utilizadas por los castellanos eran las típicas de finales del siglo XV: picas, alabardas, espadas, dagas y cuchillos, siendo especialmente destacadas en los combates contra los aborígenes las ballestas.

[39]​[55]​[nota 3]​ Una vez en el archipiélago la flota de Guinea continuó su viaje, mientras que la armada para la conquista hizo una breve escala en Lanzarote.

Tras una misa oficiada por el deán Bermúdez,[39]​[63]​ una parte del ejército formada por trescientos soldados saltó a tierra y marchó en orden dirección sur precedidos de los exploradores, mientras que el resto del ejército se dividió entre los que permanecieron en las naves fondeadas en el puerto y los que se marcharon hacia La Palma y Tenerife en busca de esclavos.

[64]​[65]​[nota 4]​ Una vez asentado el campamento los conquistadores comenzaron inmediatamente a construir para su defensa un muro de tapial en su perímetro, así como a levantar una torre y un almacén donde almacenar los bastimentos, hechos de tapial y piedra seca.

[67]​[71]​[72]​ Según Abréu Galindo el capitán Rejón envió a un intérprete para parlamentar con los canarios.

Los canarios le dijeron que al día siguiente les darían la respuesta, pero ensoberbecidos por las victorias que habían tenido sobre los cristianos en los años precedentes, tenían en realidad intención de atacar el campamento al romper el alba.

Los canarios, tras la prisión de Adargoma y al ver que llevaban la peor parte en la lucha al haber perdido unos treinta hombres y tener heridos más de cincuenta, decidieron retirarse.

Los conquistadores por su parte, que habían perdido siete hombres y heridos casi una treintena, se resguardaron tras las murallas del real.

[84]​[85]​ Los canarios, sin conocer la derrota de los portugueses, enviaron por la noche espías para saber qué había sucedido en Las Isletas.

No obstante, antes de abandonar el archipiélago lograron capturar varias naves y hasta a doscientos hombres del ejército castellano que desde la llegada a las islas permanecían asaltando Tenerife y La Palma.

Los castellanos intensificaron las entradas por los territorios de Tamaraceite, el valle del Guiniguada y hacia Telde, los lugares más próximos al real, quemando los sembrados y talando los higuerales que los canarios poseían en ellos.

Como resultado muchos canarios de estos territorios acudieron al real para rendirse ante los castellanos y solicitar ser cristianos.

[90]​ Gómez Escudero atribuye el inicio de los conflictos precisamente a la política de tierra quemada, pues el deán lo consideraba una práctica cruel contra los canarios, mientras los afines a Rejón le recriminaban al religioso que «solo sabía gobernar la iglesia».

[94]​ La conquista de Gran Canaria ha sido dramatizada en diferentes obras, tanto escritas como audiovisuales:

Una pareja de aborígenes de Gran Canaria según dibujo de Leonardo Torriani (1590).
Representación idealizada de un guerrero aborigen canario portando una lanza de madera.
Los portugueses, bajo las órdenes del infante Enrique el Navegante , intentaron en varias ocasiones sin éxito la conquista de Gran Canaria.
En 1477 los reyes de Castilla Isabel y Fernando asumen para la Corona la conquista de las islas de Gran Canaria , Tenerife y La Palma .
Península de La Isleta . En este lugar desembarcaron los conquistadores castellanos el 24 de junio de 1478.
Maqueta del primitivo real de Las Palmas ubicada en la Casa de Colón .
El príncipe Juan de Portugal envió una armada contra los castellanos que se encontraban en Gran Canaria en el contexto de la guerra de sucesión castellana .