[6][4] Especializado en historia de América y de las Islas Canarias, fue profesor extraordinario en la Universidad de Georgetown en Estados Unidos y de la Escuela Diplomática en España.
[7] En varios países latinoamericanos —México, Argentina, Perú, Colombia y Chile— fue nombrado académico de número en sus correspondientes academias de la historia.
[9] Fue fundador del Anuario de Estudios Atlánticos,[2] y dirigió también las revistas Hispania y Cuadernos de Historia,[6] editadas por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas.
Obtuvo el Premio Nacional de Literatura en 1955[3] y el Antonio de Nebrija en 1965.
[6] De su extensa obra destacan