Las demostraciones se clasifican como deimáticas o aposemáticas según la respuesta del animal que la observa.
Entre los mamíferos, las demostraciones deimáticas se encuentran en especies con defensas fuertes, tales como en las mofetas malolientes y los puercoespines.
De modo que estos comportamientos tanto en ranas como en mamíferos son parcialmente aposemáticos al menos.
Por ejemplo, los saltamontes Phymateus muestran áreas rojas y amarillas en las alas traseras; también es una conducta aposemática dado que su tórax produce una secreción de mal gusto.
[7] Tanto las arañas como los escorpiones son venenosos, por lo que sus exhibiciones amenazadoras pueden ser considerados aposemáticas por lo general.
Sin embargo, algunos depredadores como los erizos y las avispas cazadoras de arañas (Pompilidae) cazan arácnidos de manera activa y pueden superar sus defensas, por lo que cuando un erizo se sobresalta, por ejemplo, por los sonidos hechos por un escorpión, esta demostración podría clasificarse como deimática.
[10] Los escorpiones realizan exhibiciones amenazadoras: cuando se le provoca, abren sus pinzas y en algunos casos levantan su abdomen, alzan su cola casi verticalmente con el aguijón listo para su uso inmediato.
Además, algunos escorpiones producen ruidos deimáticos estridulando con los pedipalpos con el primer par de patas.
[8] El comportamiento deimático se encuentra en los cefalópodos incluyendo a la sepia común (Sepia officinalis), calamares como el calamar manopla caribeño (Sepioteuthis sepioidea) y el calamar manopla de arrecife (Sepioteuthis lessoniana), pulpos[11] como el pulpo común (Octopus vulgaris) y el pulpo patudo (Octopus macropus), y los nautilus de papel (Argonauta).
Las demostraciones deimáticas de los cefalópodos implican la muestra repentina de franjas, reforzándolas a menudo estirando los tentáculos, las aletas o la membrana del animal para verse tan grande y amenazador como sea posible.
[15] Las demostraciones no engañosas (aposemáticas) ocurren en los mamíferos que poseen defensas poderosas como espinas o glándulas odoríferas, y que habitualmente sirven de advertencia a los depredadores potenciales en lugar de intentar escapar corriendo.
Los puercoespines como Erethizon erigen sus largas púas afiladas y adoptan una postura encorvada con la cabeza hacia abajo cuando un depredador está cerca.