Cilón
La presencia de soldados megarenses no gustó al pueblo ateniense, que opuso una resistencia masiva, y cercó a los invasores.Los pritanos de los naucraros, que gobernaban entonces la ciudad, prometieron respetar sus vidas si deponían su actitud.[15] El juicio que purificó la ciudad implicaba la expulsión del culpable, igual que en las Dipolias el cuchillo del sacrificio era expulsado de la ciudad y purificado con agua de mar.La posibilidad de que sucediera durante otras festividades, las Diasia, es transmitida por Heródoto y criticada por Tucídides.[16] Obtuvo una victoria en la doble carrera, llamada díaulos, en Olimpia,[1] en la Olimpíada 35 (640 a. C.)[17] Pausanias acredita que en la Acrópolis había una estatua del conspirador, presumiblemente una ofrenda expiatoria por su muerte.