Este último cedió la mitad a la abadía de Cluny, el castillo así como el burgo y su priorato.Las fortificaciones de la época, probablemente modestas, ocupaban el espolón rocoso alrededor del cual se extendía la ciudad.En el siglo XIII, el castillo de Vizille se convirtió en residencia permanente donde la familia del delfín confirmó su poder regional.En la segunda mitad del siglo XVI, las guerras de religión que agitaron la región convirtieron Vizille un lugar codiciado.Desde 1562, el château fue ocupado por una guarnición católica que rápidamente identificó la importancia estratégica del lugar en ese conflicto.Solo quedaron los cimientos y parte de las paredes del vingtain, recinto que conectaba el château con el roquedo.Lesdiguières abordó una importante campaña de obras favorecida por sus adquisiciones en los bordes del dominio real.Su posición dominante en las laderas del roquedo, su vocabulario arquitectónico tomado de estilos medievales y renacentistas le da un carácter casi militar al edificio.Lesdiguières era sobre todo un hombre de guerra que gobernaba una provincia expuesta a muchos conflictos.Su sentido militar práctico es evidente en todos los niveles: planificación espacial, arquitectura, explotación de recursos, relaciones políticas y militares, estrategias geopolíticas, conquistas...La finca, poco usada en definitiva, se cedió al Consejo departamental de Isère en 1973.Algunos recintos también permiten acercarse a cabras, ovejas, pollos o tres pavos reales azules, en el fondo del jardín.[7] En 1948, el cineasta Jean Cocteau filmó escenas al aire libre en el dominio de Vizille para su película L'Aigle à deux têtes.