Castillo de Arraiolos

El castillo comenzó a sufrir abandono desde el siglo XIV, por ser un lugar ventoso, frío, reputado como desagradable para vivir.

El rey Fernando (1367-1383) trató de remediar esta situación concediendo privilegios especiales a sus habitantes (1371).

Entre 1385 y 1390 se iniciaron varias expediciones militares del Condestable contra Castilla.

En ese momento, un gran número de nuevas casas ya estaban repartidas por las laderas vecinas.

En el siglo XIX, su patio de armas sirvió como cementerio para las víctimas del cólera morbus en la región (1833).

La pared sólida, ancha y de altura regular, que describe una forma elipsoidal, está actualmente bien conservada.

Castillo de Arraiolos, Portugal: vista desde el adarve y las almenas.
Castillo de Arraiolos, Portugal: Puerta de Santarém vista desde el interior.
Castillo de Arraiolos, Portugal: vista desde el adarve y las almenas.