Café del Príncipe

El Café del Príncipe fue un café de tertulia del Madrid decimonónico, abierto entre 1807 y 1849, y frecuentado por intelectuales románticos de la época.Pegado al teatro del Príncipe, luego Teatro Español, el café del Príncipe albergó la tertulia del Parnasillo y vio desaparecer el convento de carmelitas descalzas de Santa Ana que José I convirtió en 1810 en una plaza.[1]​ Propiedad del matrimonio compuesto por Andrea Torreangulo e Isidro Fernández, que atendían el pequeño local junto con dos mozos, Romo y Pepe,[2]​ estaba emplazado en la calle del Príncipe junto al Teatro Español, antiguo corral del Príncipe y, a partir de 1810, frente al nuevo espacio de la Plaza de Santa Ana que antes ocupó el convento de las Carmelitas Descalzas.[3]​ Entre 1830 y 1831, reinando aún Fernando VII, comenzó a reunirse en él la tertulia literaria que llegaría a conocerse con el nombre de «Parnasillo» (o como ellos mismos se autodenominaban, «la partida del Trueno»), de la que fueron asiduos el poeta José de Espronceda, el periodista y dramaturgo Mariano José de Larra[4]​ o el escritor y cronista de la Villa de Madrid Mesonero Romanos, que lo retrataba así:[5]​ Años más tarde, el también periodista y escritor de la generación del 98, Azorín bautizó a este café como «el solar del romanticismo castellano».[7]​[8]​ El actual Café del Príncipe, que hace chaflán en la plaza de Canalejas, justo al otro extremo de la calle del Príncipe, si bien lleva el mismo nombre no tiene nada que ver.