Café en México

Es tan importante la olla de barro, que le da a este café su nombre.

Esta se podría haber llamado totoloctzin («cabeza inclinada») o acoxcapolli («sin sueño»).

[2]​ Así aparece mencionada en el Códice De la Cruz-Badiano (1553) aunque se desconoce exactamente a qué planta se refiere y los botánicos proponen diversas teorías.

Según E. Walcott (1940), hace referencia a una especie del género Coffea; según J. Valdés y F. Miranda, podría hacer referencia a Trianosperma racemosa, una cucurbitácea que crece en Veracruz y los nativos llaman totolonchi[3]​ o totonchi.

[5]​ Existen, sin embargo, diferentes versiones sobre cuándo llegó el café a México; Se cree que fue introducido en los años 1740 por comerciantes franceses, quienes lo importaron desde la isla de Martinica,[6]​ aun hoy colonia francesa.

Se cultiva en menor medida en Guerrero, San Luis Potosí, Nayarit, Hidalgo, Jalisco, Querétaro, Colima, México, Campeche, Tabasco y Michoacán.

Una taza de café de olla con un terrón de piloncillo
Producción cafetalera en Zihuateutla , Puebla.
Estados productores de coffea arabica con proceso comercial Estados productores de coffea arabica sin proceso comercial .