[4] Aunque su posición era crucial para el Estado peruano, estaba modestamente defendida solo por la policial Base DOES-6-Uchiza con cincuenta a sesenta efectivos.El M-19 estaba presente de forma no oficial en el conflicto, para apoyar a Sendero Luminoso en la guerra contra el Estado peruano.[1] Minutos antes del ataque, el Ejército Guerrillero Popular y sus narcotraficantes auxiliares dividieron a sus siete camiones con militantes en dos puntos opuestos de la ciudad.[1] El enfrentamiento inició entre las 16:45 a 17:10 horas en la Base DOES-6-Uchiza y la misma ciudad, que contaba con siete puestos de vigilancia, siendo el principal ubicado en el Hostal San Pedro.[1] Al finalizar la contienda, los militantes del Partido Comunista llevaron a sus muertos y heridos en sus mismos camiones.[1] Al ver que la población local no tenía animadversión contra la policía, inventaron un supuesto secretismo de las cabezas policiales sobre información proveniente de Lima (la CVR llegó a la conclusión que esto era falso y solo era una justificación para poder ejecutar a los policías).[1] El terrorista José Arcela Chiroque, "camarada Alfredo", fue el que ejecutó a los tres miembros policiales.La nota periodista del Diario Correo confirma que existen diferencias entre su relato y el informe final de la CVR.[5] La población civil fue víctima de las huestes insurgentes, una señora que socorrió a los policías heridos fue ultimada en ese mismo instante por «soplona», para luego su cuerpo ser trasladado a un área de la ciudad con un cártel que decía «así mueren las soplonas».[7][8] El sitio de Uchiza sirvió como una antesala al enfrentamiento en Madre Mía en julio del mismo año, ya que la victoria senderista envalentonó al Partido Comunista, que le animó a intentar repetir el asedio contra uno de los puntos neurálgicos del Ejército peruano, la base Madre Mía.
Población civil pasando por los restos humanos de los asesinados, 1989.