En cambio, se dispusieron como capilla en todas las parroquias a partir de dicho siglo.Se conoce también con el nombre de baptisterio al lugar o sección de la iglesia dedicado al bautismo, en el cual se ubica la pila bautismal.Los primeros cristianos, según san Justino mártir y Tertuliano, no tenían más bautisterios que las fuentes, los ríos, los lagos o la mar que estuviesen más cerca de su habitación y como muchas veces la persecución no les permitía bautizar en medio del día, acudían de noche o conferían el bautismo en sus casas.Pretenden algunos autores que estos bautisterios estaban colocados antiguamente en el vestíbulo interior de las iglesias, como lo están ahora nuestras pilas bautismales pero esto es un error.[4] En los autores antiguos se dice poco en cuanto a la forma y adornos de los baptisterios o al menos lo que de ellos se dice es muy incierto.[5] Aunque no es algo común, algunas confesiones cristianas han construido modernos baptisterios.