[1] Estudió en el Liceo Salvadoreño y comenzó a publicar sus trabajos literarios desde el año 1890, cuando todavía era un adolescente.
Ya en el año siguiente se desempeñaba como agente del semanario cubano La Habana elegante, y como colaborador de la revista salvadoreña La pluma, que le mereció elogios por parte de Francisco Gavidia y Rubén Darío, de quien se dice era su ídolo en la adolescencia.
[2] Dichos textos aparecieron en la Revista Azul del mexicano Manuel Gutiérrez Nájera.
[1] Para Max Henríquez Ureña, el salvadoreño fue el «Benjamín del modernismo», no solo de El Salvador, sino de toda América,[2] mientras que el mismo Darío le llamó Enfant terrible.
Sin embargo, igualmente destacan sus relatos costumbristas, que captan la vida campesina y pueblerina de antaño.
El escritor modernista, periodista y funcionario Arturo Ambrogi Acosta (n. 1875). Él y Manuel Andino fueron los cronistas de la vida diaria de esa San Salvador que existió entre 1890 y 1950.
Arturo Ambrogí. Recibió una formación de élite en literatura hasta el punto de que fue sin duda el mejor informado de su época en El Salvador. Nunca se casó o tuvo hijos, aunque su hermano Constantino Ambrogi Acosta se instaló en Nicaragua donde sus descendientes han continuado la tradición literaria.
Tumba del escritor Arturo Ambrogí, situada en el cementerio los ilustres, san Salvador. Conocido como el escritor que desarrolló la narrativa a través del relato y crónica costumbrista .Las obras de Ambrogi revelan, además de experiencias en el extranjero, la forma de vida y el lenguaje del ambiente campesino del país