Aunque la partícula al- es invariable, el sonido de la consonante -l final puede variar.
Cuando la sigue una letra solar (ḥurūf shamsiyya) como t, d, r, s o n y alguna otra, asimila ese sonido, duplicándolo.
Para poner al- en perspectiva, existen diferentes formas de definir gramaticalmente las palabras árabes.
[3] Además del posesivo, anteponer un sustantivo con al- es la forma más débil de definición gramatical.
El árabe, además, tiene un artículo indefinido indicado por la nunación (tanwīn) que se declina en tres casos.