Los arrecifes de coral crecen mejor en aguas cálidas, poco profundas, claras, soleadas y agitadas.
En la medida que continúa el hundimiento, el arrecife se convierte en una barrera de coral, y, en última instancia, en un atolón.
[13][14] Como el nivel del mar subió, el agua y los corales invadieron lo que fueron colinas de la llanura costera australiana.
Así, en el Cámbrico inferior (570-536 Ma) se debieron a algas calcáreas y a arqueociatos (pequeños animales filtradores de forma cónica, probablemente emparentados con las esponjas), y en el Cretácico superior (99-65 Ma) existieron también arrecifes formados por un grupo de bivalvos denominados rudistas (una de las valvas, hipertrofiada, formaba la estructura cónica principal, y la otra, mucho más pequeña, actuaba como tapa).
La región del Indo-Pacífico (incluyendo el mar Rojo, el océano Índico, el Sudeste Asiático y el Pacífico) representa el 91,9 % de este total.
[29] Sin embargo, los arrecifes del golfo Pérsico lograron adaptarse a temperaturas de 13 °C en invierno y 38 °C en verano.
[30] Los corales de aguas profundas, como Lophelia pertusa, pueden existir hasta a 3.600 metros de profundidad, en temperaturas más frías, entre 1.11 y 25.28 °C,[31] y en latitudes mucho más elevadas, tan al norte como hasta Noruega.
[41] Las olas, peces herbívoros (por ejemplo, peces loro), erizos de mar, esponjas de mar, y otras fuerzas y organismos actúan como bioerosionadores, rompiendo los esqueletos coralinos en fragmentos que se depositan en la estructura del arrecife o forman fondos arenosos en las lagunas arrecifales.
El período entre la liberación hasta la fijación solo dura unos pocos días, pero algunos plánulas pueden sobrevivir, flotando, durante varias semanas.
[43] El coral parece proliferar cuando las aguas del océano son cálidas, pobres en nutrientes, claras y agitadas, un hecho que Darwin ya había señalado a su paso por Tahití en 1842.
Durante su viaje en el Beagle, Darwin describió los arrecifes de coral tropicales como oasis en el desierto del océano.
Sin embargo, todas las redes alimentarias eventualmente dependen de plantas, que son los productores primarios.
[45] Una razón para la inusual claridad de las aguas tropicales es que son deficientes en nutrientes y en plancton.
Estos nutrientes son necesarios para el crecimiento de las plantas, pero en los trópicos, no se devuelven directamente a la superficie.
Se convierten en refugios para la vida marina, proporcionando protección contra las olas y las tormentas.
Más importante aún, los arrecifes reciclan nutrientes, lo que sucede a una escala mucho menor en el océano abierto.
[46] El fitoplancton es comido por peces y crustáceos, que también pasan los nutrientes a lo largo de la cadena alimentaria.
En general, el reciclaje garantiza que se necesita de menos nutrientes para sustentar la comunidad.
Muchos corales extienden sus tentáculos por la noche para atrapar zooplancton que pasa cuando el agua está agitada.
Otros pigmentos como rojo, azul, verde, etc, provienen de las proteínas coloreadas producidos por los propios corales.
Normalmente, una capa delimitante de agua quieta rodea un objeto sumergido y actúa como una barrera.
[cita requerida] En la subclase Zoantharia o Hexacorallia, y en el orden Scleractinia, se encuentran los arquitectos del suelo marino, formadores de los arrecifes, los corales hermatípicos.
Aves tropicales, como garzas, alcatraces y pelícanos, también se alimentan de peces arrecifales.
El estudio se realizó en Bahamas, Bonaire, Belice e isla Gran Caimán, y fue publicado en la revista Nature Communications, financiada por el fondo británico Leverhulme Trust.
[81] Las áreas marinas protegidas (AMP) se han vuelto cada vez más importantes para el manejo de los arrecifes.
Al igual que los parques nacionales y los refugios de vida silvestre, las AMP restringen actividades potencialmente dañinas.
[cita requerida] En algunas situaciones, las AMP pueden proporcionar ingresos equivalentes a los que habrían generado sin limitaciones, como ocurrió en las islas Fénix en Kiribati.
Los gobiernos estatales y federales de los Estados Unidos también controlan la erosión costera como medio para disminuir la acidificación del océano.
[cita requerida] En grandes proyectos de restauración se utilizan corales hermatípicos cultivados que son fijados al sustrato con pasadores metálicos, adhesivos como cianoacrilato o milliput.
El carbonato blanco (aragonita) resultante es el mismo mineral que forma los arrecifes de coral naturales.