El término "Barbarroya" podría derivar de la raíz celta "barb", altura, y del latín "rubea", por lo que vendría a significar colina roja.
A mediados del siglo XIX, el lugar tenía contabilizada una población de 790 habitantes.
La primera, que revela un proyecto monumental, comenzó bajo la dirección del maestro Trujillo, y está datada en el año 1514, siendo de estilo gótico plateresco con ábside de tres paramentos y contrafuertes rematados en bolas renacentistas.
El ábside se cubre mediante bóveda de crucería con medallones en las claves.
Como característica principal destaca la existencia de un amplio peristilo en sus tres lados formado por pilares y columnas que nos informan sobre su importancia romera.
Es un antiguo trazado ferroviario en desuso acondicionado para la práctica del cicloturismo y el senderismo.