Un parador es un establecimiento de hostelería similar a la posada.
A partir del siglo xx pasó a denominar en España a una red más que una cadena (pues la primera pretende abarcar todo el territorio mientras la segunda se forma a partir de la construcción de hoteles por interés económico) de establecimientos públicos (del Estado) de alto nivel, que buscaba cubrir zonas sin hospedaje y con atracción turística asociada casi siempre a edificios históricos de la ciudad, lugar o región en la que se crearon.
En el siglo xxi se alcanzó casi el centenar de establecimientos españoles, frente a las 44 «pousadas» instaladas en edificios históricos en Portugal, y gestionadas por un grupo empresarial.
[6] En España,[7] el uso del término se mantiene en pleno siglo xx como puede leerse en el libro Viaje a la Alcarria del Nobel Camilo José Cela o, un siglo antes, en el Madrid en la mano, publicado en 1850 por Pedro Felipe Monlau, catalogado en el capítulo titulado Posadas, paradores y mesones.
[8] También utiliza el término parador el escritor británico nacido en Malta, Gerald Brenan, en su libro autobiográfico Al sur de Granda relatando su estancia en España entre 1920 y 1943.