El Papa Juan Pablo II realizó cinco viajes durante su pontificado, siendo su primera visita a República Dominicana, la primera vez que un Papa visitaba dicho país, y además fue parte de su primer viaje apostólico de su pontificado que incluyó a México y Bahamas.
Su viaje incluyó la Ciudad de México, Puebla, Oaxaca, Guadalajara y Monterrey.
El 26 de enero de 1979, llegó a Ciudad de México desde Santo Domingo, en visita sin carácter oficial, viajando como un turista más, arribando al Aeropuerto Internacional Benito Juárez, donde se dirige a la Catedral metropolitana donde dijo:[1] Al día siguiente viajó a Puebla por tierra, donde utilizando un vehículo descapotable, que fue un improvisado papamóvil, según el Cardenal Alfonso López-Trujillo, en un viaje casi le provoca una insolación,[2] donde inauguró la Tercera Conferencia General del Episcopado Latinoamericano en el Seminario Conciliar Palafoxiano, que tenía como tema "La evangelización en el presente y futuro de América Latina", en el discurso inaugural menciona un tripode que fue la espinal dorsal de dicha conferencia que fue: la verdad sobre Cristo, sobre la Iglesia y sobre el hombre.
El día 29 de enero llegó a Oaxaca, en la Catedral pronunció una homilía sobre el apostolado de los laicos, luego llega a Cuilapan donde se reúne con las comunidades indígenas.
En esta visita el Papa firma y entrega la exhortación apostólica postsinodal Ecclesia in America, basada en las conclusiones obtenidas a partir de la Asamblea Especial para América del Sínodo de los Obispos con el tema "Encuentro con Jesucristo vivo, camino para la conversión, la comunión y la solidaridad en América", que se llevó a cabo a fines del año 1997,[1] la cual fue firma el día 22 en la nunciatura apostólica y entregada al día siguiente en la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe.