La trágica historia del doctor Fausto
Está escrita principalmente en verso blanco (pentámetro yámbico carente de rima), aunque también hay breves trozos en prosa.Christopher Marlowe escribió la obra probablemente en 1592, aunque la fecha exacta sigue siendo desconocida, ya que no se publicó hasta diez años más tarde.En la escena primera, Fausto reflexiona sobre los mejores tipos de estudio; considera primero la lógica, tal como fue enseñada por Aristóteles, pero la rechaza, pues su único fin, al parecer, es discutir, algo en lo que Fausto ya es bueno, y por lo tanto, no le es útil.El Ángel del Mal, por su parte, hace todo lo contrario, hablándole de los grandes poderes que la magia le proporcionará.El sabio imagina cómo enriquecerse, mandando a los espíritus a buscar joyas y especias al fin del mundo, haciendo que le revelen los conocimientos prohibidos y haciéndose de rey de toda Alemania.Los académicos, preocupados por las nuevas amistades de Fausto, temen que esté involucrándose en las artes mágicas.Wagner conjura a dos diablos para que asusten al bufón, el cual se aterroriza y acepta la propuesta.A pesar de esta respuesta Fausto acepta el contrato, que firma con su sangre.Mefistófeles va a buscar fuego con que volver líquida la sangre y, mientras está fuera, Fausto duda de nuevo.Cuando Mefistófeles regresa, Fausto firma el contrato y descubre en su brazo la inscripción “Homo fuge” (hombre huye).Como puede verse, Mefistófeles elude las mal formuladas preguntas de Fausto dando siempre respuestas evasivas.A su petición de aprender magia, Mefistófeles le da un libro para que lea cuidadosamente.Cada uno de estos se aparece personificado frente a Fausto y hace un breve monólogo.La escena VII se inicia con Wagner contándonos cómo Fausto ha viajado por los cielos en un carruaje tirado por dragones para aprender los secretos de la astronomía y que ahora ha estado midiendo los tamaños de las costas y los reinos, lo que le ha llevado a Roma.(Lo que sucede en esta escena aparece solo en textos basados en el manuscrito de Doctor Faustus).Carlos V del Sacro Imperio Romano ha invitado a Fausto al palacio imperial.Fausto llega ante el emperador, quien le da las gracias por haber liberado a Bruno de la ira del Papa.Pero mientras están celebrando su muerte y pensando qué otras fechorías hacer al cuerpo, Fausto se levanta, con su cabeza otra vez en sus sitio.La vida de Fausto pertenece a Mefistófeles y nadie más le puede matar.Wagner luego entra y le dice a Fausto que el duque de Vanholt lo ha llamado.Después comienzan a quejarse por las fechorías de Fausto, quien les silencia con un hechizo y se marchan.Cuando el reloj marca las doce, los demonios aparecen para llevarse a Fausto entre los gritos y maldiciones de este.