Lo que comenzó por su iniciativa como una hoja cristiana, en un pequeño taller, se convertiría después en el Diario La Columna.La sociedad reservaba entonces muy pocos espacios para las mujeres, pero animada por su padre, un intelectual progresista y liberal, educado en Francia, Teresa trabajó desde muy joven, compaginando la enseñanza voluntaria del catecismo en las escuelas más necesitadas de Maracaibo, con sus dotes para la escritura.[3] En 1917, el gobierno de Juan Vicente Gómez clausuró la imprenta y el periódico, debido al apoyo del diario a los países Aliados durante la Primera Guerra Mundial.Gómez simpatizaba con el Imperio Alemán en el conflicto y, aunque el dictador controlaba casi toda la prensa venezolana, El Fonógrafo mantuvo su línea editorial a pesar de las amenazas constantes del gobierno.Este diario católico circuló durante 75 años y llegó a ser uno de los más importantes periódicos del Estado Zulia.