Pertenece a la cuenca del río Los Sarmientos el cual, en la actualidad, sigue un régimen fluvial irregular.
Tamberías del Inca no fue reocupado durante el periodo transicional, conforme lo afirmó el arquitecto Héctor Greslebin en 1939.
Al este se encuentran un par de kanchas contiguas, las cuales probablemente fueron la residencia del gobernador principal.
En el medio de la plaza, se erige un ushnu: una gran plataforma usada por las autoridades incas para presidir eventos.
Durante la expansión inca por Argentina, se encontraron numerosas vetas de plata en las inmediaciones del Cerro General Belgrano.
Este descubrimiento motivó al Imperio incaico a asegurar inmediatamente los yacimientos metalíferos, procediendo con la construcción de Tamberías del Inca.
Las instalaciones destinadas a proteger y acondicionar turísticamente el yacimiento solían estar abandonadas y/o vandalizadas.
Las limpiezas vecinales, realizadas en 2006 y 2019 para retirar la basura del sitio, no resolvían mucho a largo plazo.
Los avances del proyecto fueron visitados por un gran número de funcionarios argentinos, incluyendo el gobernador Ricardo Quintela.