Siendo evidente la influencia que un trastorno psiquiátrico tiene en la vida de un individuo, se puede sospechar que se vea afectada la forma de vivenciar la sexualidad, las conductas sexuales y la propia actitud hacia el sexo.
[2] Aunque tenemos que reconocer una gran variabilidad, en general, las personas con esquizofrenia manifiestan a nivel psicológico una sexualidad “primitiva”, basada en la intimidad y los cuidados.
[4] Según estudios, tanto hombres como mujeres refieren practicar menos coitos heterosexuales que la población general.
[2] Tras diversos estudios se podría llegar a las siguientes conclusiones sobre la relación entre la disfunción sexual y la esquizofrenia: En cuanto a las manifestaciones más frecuentes en personas con esquizofrenia, se pueden encontrar; la confusión en la identidad genérica, el sadomasoquismo, la pérdida de la libido dirigida al objeto y la inhibición sexual, variablemente referidos en la literatura clínica como modelos esenciales de la sexualidad en la esquizofrenia.
La propia sintomatología de la enfermedad va a condicionar la conducta sexual del esquizofrénico.
[13] Por ejemplo las fenotiazinas pueden mejorar la respuesta sexual como resultado de la mejoría de la enfermedad mental, si bien, con ellas se pueden presentar eyaculaciones "secas", debidas a los efectos paralizadores del esfínter vesical interno, que hace que el semen se vacíe en la vejiga.
Psiq Biol;13(1):22-9 Rodríguez de Molina Román, M., Salvador Carulla, L., González Infante, J.M.