El padre tenía una carnicería en el barrio de Barracas y Oves iba al Cine Colonial que estaba en Avellaneda, donde todas las semanas daban tres películas argentinas.
Más adelante los padres estaban a cargo del cine Lorrange, y allí trabajó como boletero y vio por primera vez las películas de Truffaut, Godard, Risi, Scola, Monicelli.
Así que era una escuela práctica, uno aprendía viendo cine.”[1] A Oves le gustaba escribir y también la actuación.
En 1987 dirigió Revancha a un amigo, su primer largometraje, con la actuación de Ricardo Darín, Lorenzo Quinteros, Rodolfo Ranni y Luisa Kuliok, película que hablaba sobre un desaparecido, pero que estaba planteada en clave policial.
Si antes podía haber el problema de los padres divorciados, al momento del film la cosa es más complicada, porque había una emigración al exterior que determina muchos desmembramientos en las familias.