Revolución de Guatemala de 1944

[29]​ Finalmente, completó la centralización del poder al eliminar a los alcaldes popularmente electos por intendentes que eran nombrados por el propio presidente.[i]​ Entre los beneficios que recibió del Gobierno estadounidense a cambio de su alianza en la guerra hubo armamento moderno para el Ejército y entrenamiento en la Escuela Politécnica a cargo de militares norteamericanos.Esto dejaba fuera a los maestros, quienes comenzaron una serie de protestas pacíficas para ser incluidos en este aumento.Me retiro del poder dejando tras de mí una obra realizada; que si no llena ni hubiera llegado nunca a colmar mis aspiraciones de guatemalteco, es prueba no refutable del amor que como ciudadano profeso a mi patria y del cuidado que le dediqué como gobernante.Los generales, temerosos, continuaron: - Entre los miembros de su Plana Mayor, se quisiera saber que si en caso, ¡que Dios no lo permita!, su Excelencia llegara a faltar quien consideraría Usted que es el más apropiado para sucederle.Sin pensarlo siquiera, Ubico Castañeda levantó la vista un momento, y señalándoles con su pluma fuente contestó: - ¡Ustedes tres!Entre los participantes a esa reunión estuvieron Ricardo Asturias Valenzuela, Alfonso Bauer Paiz y José Manuel Fortuny.La escuela se caracterizaba entonces por tener un internado obligatorio, régimen y disciplina militar, estudiantes becados en condiciones económicas bastante reducidas, predominio de alumnos de la provincia, y un claustro altamente cualificado presidido por Luis Martínez Mont.Alentados por las circunstancias, insistieron y el nuevo Gobierno les otorgó la desmilitarización del establecimiento educativo.[35]​ Los autores del atentado, Federico Paiz Madrid, Luis Ochoa del Cid y José Manuel Herrera Muñoz, corrieron hacia una camionetilla en la que los esperaba Humberto Mendizábal Amado; se dirigieron al Tercer Destacamento de Policía, en el barrio de San Pedrito y dejaron abandonado el vehículo.[43]​ Entre los militares estaban Manuel J. Pérez, el mayor Carlos Aldana Sandoval, el capitán Jacobo Árbenz y Francisco Javier Arana, a quienes se sumó prácticamente toda la oficialidad de aquel cuerpo militar.Algunos se encargaron de mantener contactos con diversos activistas civiles que colaborarían durante la lucha armada.Además, el hombre de negocios Jorge Toriello, el dirigente obrero Silverio Ortiz, el doctor Julio Bianchi y un grupo de estudiantes encabezados por los hermanos Mario Méndez Montenegro Mario y Julio César Méndez Montenegro, Oscar de León Aragón y Julio Valladares Castillo, entre otros.[o]​ Entre todos ellos lograron reunir ochocientos hombres que pelearon en diversos barrios de la ciudad, entre otros, «La Palmita», «La Reformita», «Santa Cecilia» y en las calles céntricas, enfrentándose a la policía nacional y a los francotiradores que cobraron muchas vidas humanas.El contingente obrero estuvo integrado por albañiles, carreteros, maestros, tipógrafos, ferrocarrileros, jornaleros y toda una amplia gama de oficios.[49]​ Las principales funciones del Gobierno de transición fueron derogar los decretos que había promulgado la administración anterior.En el libro «Despacho Presidencial» de Arévalo, se observa que el gobierno empezó con sanciones a la oposición,[r]​ intervencionismo económico del Estado[s]​ y un decidido apoyo a un movimiento sindicalista recién surgido.[w]​ Arana había aceptado este pacto porque quería ser conocido como un «héroe demócrata» de la sublevación contra Ponce y creyó que el Pacto del Barranco garantizaría su posición cuando llegara el momento de las elecciones a presidente.[62]​ Arana era una persona muy influyente en el Gobierno de Juan José Arévalo, y había logrado ser nominado como el siguiente candidato a la presidencia, por delante del capitán Arbenz, a quien se le dijo que por su corta edad (apenas 36 años en ese tiempo) no tendría problema en esperar su torno para las elecciones siguientes.[58]​ Pero la élite social no estaba conforme con el gobierno arevalista, pues por primera vez en la historia del país la clase media urbana tenía poder y lo había utilizado para que el Gobierno adoptara medidas en favor de los obreros de la ciudad.[63]​ Los terratenientes tradicionales empezaron a cortejar al teniente coronel Arana, para que liderara un golpe de Estado contra Arévalo y se opusiera a las nuevas reformas que este había emprendido.[64]​ A partir de ese momento, las relaciones entre Arana tanto con el presidente Arévalo como con el Congreso se fueron distanciando, y se empezó a rumorear acerca de un posible intento golpista del militar y un posible descontento del presidente con el movimiento «Arana para Presidente» que ya se había iniciado.[66]​ En otra oportunidad, a mediados de 1949, Arana habría girado instrucciones a sus hombres en la Guardia de Honor para que lo esperaran en la noche para dar un golpe contra el Gobierno; pero Arana ya no llegó porque pasó la noche bebiendo con Arévalo en la Casa Presidencial.[67]​ La muerte del teniente coronel Francisco Javier Arana es de crítica importancia en la historia del país, pues fue un evento crucial en la historia de la revolución guatemalteca: su muerte no solo abrió las puertas a la elección del coronel Jacobo Árbenz como presidente de la república en 1950[x]​ sino que también causó una aguda crisis en el Gobierno del doctor Arévalo Bermejo, quien se vio enfrentado contra un ejército que había sido fiel al mayor Arana, y a grupos civiles de derecha que aprovecharon la ocasión para protestar fuertemente contra su gobierno.[73]​ Arévalo llamó a Árbenz para que se hiciera cargo de la situación, y este envió a varios hombres armados, quienes salieron desde la capital en dos carros e iban bajo las órdenes del jefe de la policía, teniente coronel Enrique Blanco y por el diputador del PAR Alfonso Martínez, un oficial retirado y amigo de Árbenz.[73]​ Cuando Arana llegó al puente de La Gloria, un Dodge gris estaba parado allí obstruyéndole el paso.[74]​ Los testigos presenciales nunca confirmaron cual fue el detonante de los disparos y si la intención había sido capturar a Arana como estaba previsto.Esta administración tuvo enfrentamientos con el Gobierno del coronel Árbenz, pero el Gobierno, mediante obra pública[z]​ intervino en la producción de nuevos espacios en la ciudad y, en algunos casos, en la valorización de la tierra que fue incorporada a la ciudad por medio de los nuevos ejes viales como la carretera Interamericana que se construyó a partir del Hospital Roosevelt.[79]​ Con el apoyo de las dictaduras de Nicaragua y Honduras se planeó una invasión desde este último país, se reunió un pequeño ejército, cuyos aviones incursionaron sobre Guatemala, arrojando propaganda contra el Gobierno y atacando objetivos militares.[81]​ El coronel Monzón, presidente de la junta militar, firmó con Castillo Armas, en San Salvador, un pacto que puso fin a la guerra, y le otorgó el poder a este, quien había traicionado al Lic.
Mapa de rutas de la «Flota Blanca» de la United Fruit Company , la cual tenía el monopolio de transporte de carga y personas de Puerto Barrios, tras las generosas concesiones otorgadas por Estrada Cabrera.
El licenciado Manuel Estrada Cabrera. Primer presidente civil de Guatemala, gobernó entre 1898 y 1920. [ 6 ]
Carlos Herrera y Luna
José María Orellana
El general Jorge Ubico Castañeda , presidente de Guatemala de 1931 a 1944.
La profesora María Chinchilla Recinos en 1940. Su muerte durante la manifestación del 25 de junio de 1944 precipitó la renuncia del presidente Jorge Ubico .