La victoria más destacada atribuida a Tanaka fue la batalla de Tassafaronga, donde su escuadra consiguió derrotar a una fuerza mucho mayor que la suya que incluía cuatro cruceros pesados y seis destructores de apoyo.
[2] Durante la batalla, su gran habilidad en el uso de los torpedos le permitió acertar a cuatro cruceros estadounidenses.
Su 2.º escuadrón estaba en un principio formado por 8 destructores más el Jintsu, participando en las invasiones japonesas de Filipinas[6] y las Indias Orientales[7] (actual Indonesia) en los primeros meses de la Guerra del Pacífico entre Japón y los Aliados.
Mientras se recuperaba en su base en las Islas Shortland, sus esfuerzos se dirigieron a organizar los refuerzos y los abastecimientos que debían ayudar a los soldados japoneses que luchaban en Guadalcanal.
[8] Su estrategia para abastecer Guadalcanal se apoyaba en el uso de rápidos destructores nocturnos para así evitar la supremacía aérea aliada.
Mediante el uso del radar, los barcos estadounidenses sorprendieron a Tanaka, resultando hundido un destructor japonés.
Sin embargo, Tanaka respondió rápidamente mediante la emisión de rápidas órdenes a sus buques para maniobrar y evacuar la zona.
Su caída en desgracia ante los altos mando militares precipitó su envío a Birmania en 1943, permaneciendo en el ejército terrestre hasta el final de la guerra.