La prosección es un trabajo complejo en el que se utilizan numerosas herramientas para producir el resultado deseado.
El líquido para embalsamar contiene formaldehído, fenol, ettol, y glicerina que desinfectan el cadáver.
No se aceptan cadáveres si tienen un historial médico de enfermedades infecciosas como la tuberculosis y el VIH / Sida.
Hay muchos casos de muerte por septicemia aguda en patólogos debido a estos accidentes.
Un caso conocido es el del doctor Ernst von Fleischl-Marxow, un médico austriaco, patólogo y fisiólogo, cuyo dedo se infectó durante una autopsia.