UU. es un país relativamente rico según los estándares internacionales,[5] la pobreza y al mismo tiempo los esfuerzos para aliviarla, han estado presentes a lo largo del tiempo en Estados Unidos, desde la legislación de la era del New Deal durante la Gran Depresión, hasta la guerra nacional contra la pobreza en la década de 1960 y las acciones para mitigar la pobreza durante la Gran Recesión de 2008.
[14] Un grupo especialmente vulnerable a la pobreza estaba formado por los aparceros y los arrendatarios pobres del sur.
[15] El historiador James T. Patterson se refiere a estas personas como la "vieja pobreza", para distinguirla de la "nueva pobreza" que surgió a partir del inicio de la Gran Depresión.
Muchos programas del New Deal fueron diseñados para aumentar el empleo y reducir la pobreza.
Adicionalmente, la institución del Seguro Social fue uno de los mayores factores que ayudaron a reducir la pobreza.
Muchos de sus programas fueron administrados por la recién establecida Office of Economic Opportunity.
La medida estadística "oficial" de la pobreza en los Estados Unidos se adoptó recién en 1969.
[23] Los colaboradores académicos de «The Routledge Handbook of Poverty in the United States» postulan que han surgido formas nuevas y extremas de pobreza en los EE.
[24] Muchos organismos internacionales han puesto énfasis en los problemas de pobreza que enfrenta Estados Unidos.
UU. como el país con la segunda tasa de pobreza infantil relativa más alta del mundo desarrollado.
[10] El gobierno federal de los Estados Unidos utiliza diversas fórmulas para medir la pobreza.
Son útiles porque los umbrales de pobreza para un año calendario no se publican hasta el verano del siguiente año calendario; las pautas de pobreza, por otro lado, permiten que las agencias trabajen con datos temporalmente más precisos.
[37] La NRC convocó un panel que publicó en 1995 el informe «Measuring Poverty: A New Approach».
Los investigadores llegaron concluyeron que la medida oficial de la pobreza en los Estados Unidos era defectuosa.
[46] En 1969 la Oficina de Estadísticas Laborales presentó un modelo estimativo sugerido para una vida familiar adecuada.
Dado que el modelo estimado "intermedio" era bastante modesto, los observadores cuestionaron los criterios adoptados para determinar los elementos indicativos de prosperidad, cuya tenencia indicaría que un grupo familiar no está en situación de pobreza.
[48] También ha habido críticas a la metodología utilizada para desarrollar los «umbrales de pobreza».
[53][54] Sin embargo, tales fluctuaciones en los mercados locales no se consideran en el umbral de pobreza federal y pueden dejar a muchos que viven en condiciones equiparables a la pobreza fuera del número total de hogares clasificados como pobres.
La «Medida Suplementaria de Pobreza», introducida en 2011, tiene como objetivo brindar una imagen más precisa del verdadero alcance de la pobreza en los Estados Unidos al tomar en cuenta los beneficios no monetarios y las variaciones geográficas.
[55] Según esta nueva medida, el 16% de los estadounidenses vivían en la pobreza en 2011, frente al 15,2% oficial.
UU. es inconsistente con la forma en que la definen sus propios ciudadanos y el resto del mundo, porque el gobierno de EE.
UU. considera que muchos ciudadanos están estadísticamente empobrecidos a pesar de su capacidad para satisfacer suficientemente sus necesidades básicas.
UU. consideró que estaban por debajo del nivel de pobreza en 2009, la mayoría tenía vivienda adecuada, alimentos, ropa y atención médica.
Por ejemplo, en 2005, el 63,7% de los que vivían en la pobreza tenían televisión por cable o satelital.
[61][62] Según The Heritage Foundation, la línea de pobreza federal también excluye los ingresos que no monetarios, especialmente los beneficios sociales.
Se dirigen a grupos específicos afectados por la pobreza, como niños, inmigrantes o personas sin hogar.
Los esfuerzos para aliviar la pobreza utilizan un conjunto dispar de métodos, como la promoción, la educación, el trabajo social, el servicio directo o la caridad y la organización comunitaria.
Cada dólar acumulado en los ahorros de la IDA se equipara con fondos federales y no federales para permitir que los hogares aumenten su cartera de activos comprando su primera vivienda, puedan financiar una educación postsecundaria o iniciar o ampliar una pequeña empresa.