Johnson declaró que «nuestro objetivo no es solo aliviar los síntomas de la pobreza, sino curarla y sobre todo prevenirla».
[2] Los programas de la Gran Sociedad del presidente demócrata Lyndon Johnson, incluida la «guerra contra la pobreza», se preservaron e incluso se ampliaron durante las administraciones republicanas posteriores de Richard Nixon y Gerald Ford.
Los directores de la OEO incluyeron a Sargent Shriver, Bertrand Harding y Donald Rumsfeld.
El presidente Johnson también anunció un segundo proyecto para seguir a los niños del programa Head Start, que comenzó en 1967 con el proyecto Follow Through, el experimento educativo más grande y costoso jamás realizado por el gobierno de Estados Unidos, que lo financió hasta 1995.
Job Corps continúa ayudando a 70.000 jóvenes anualmente en 122 centros por todo el país.
[6] La llamada línea de pobreza absoluta es el umbral por debajo del cual se considera que una familia o individuo carece de los recursos necesarios para satisfacer las necesidades básicas que le permitan gozar de una vida saludable: un ingreso insuficiente para procurarse los alimentos, vivienda y ropa necesarios para tener buena salud.
[13] Martin Luther King criticó en su libro Where Do We Go from Here: Chaos or Community?
[14] King relacionó la guerra en Vietnam con la guerra contra la pobreza en un discurso del 4 de abril de 1967:[15] Esta crítica, comparando la actuación gubernamental en el interior con la del exterior, fue habitual en Luther King.
Un mes después del discurso anterior, en el mismo lugar —la iglesia Riverside de New City—, también dijo: «y quizás no lo sepan, amigos míos, pero se estima que gastamos 500.000 dólares para matar a cada soldado enemigo, mientras gastamos solo 53 dólares por cada persona clasificada como pobre, y gran parte de esos 53 dólares se destina a salarios de personas que no son pobres».
[18] En líneas generales, los partidarios de las escuelas de pensamiento favorables al liberalismo económico y el conservadurismo social recomiendan combatir la pobreza a través del crecimiento económico y no a través del gasto público.