Chevrolet y Ford fabricaban coches más baratos.
En 1930, el mundo entero estaba sufriendo la Gran depresión y la industria automotriz se vio particularmente afectada.
En aquellos días no se podían vender de ninguna manera coches caros.
Como los Plymouth eran relativamente baratos, la marca se vio menos afectada.
Debido al poco éxito del modelo, en abril de 1933 se lanzó un nuevo modelo más grande similar al Dodge, pero tuvo un gran éxito.