Pocos datos de su persona han llegado a nosotros, pero parece ser que sus trabajos comienzan alrededor del año 1290.
Además, escribir música resultaba muy caro ya que estas "partituras" ocupaban mucho espacio en los libros.
La solución se contempló en la notación franconiana, llamada así después de que el teórico musical Franco de Colonia la esbozase en su tratado Ars cantus mensurabilis (El arte del canto medible) alrededor del año 1260.
Estos símbolos han creado confusión con la notación moderna, ya que en esta el significado de los puntos es distinto.
[1] Como músico compuso alrededor de 1300 motetes, estos todavía se consideran parte del ars antiqua.