Su nombre era Peter Kempeneer, castellanizado con motivo de su estancia hispánica.
En su familia había varios pintores, tapiceros y hombres de letras.
Un pariente suyo, Jacobo, llegó a ser alcalde de la ciudad.
[5] Francisco Pacheco escribió una reseña biográfica sobre él en su libro de retratos.
No llegó a conocerle personalmente, y le dibujó teniendo como referencia su autorretrato.
[8] Se aprecian en sus obras relaciones con las de Perino del Vaga.
[9] Angulo Íñiguez describe su estilo del siguiente modo:[10] La producción de Campaña en su etapa italiana es muy poco conocida, aunque le han sido atribuidas diversas obras como realizadas en este lugar.
En 1557 se encargó su pintura y dorado a Pedro de Campaña, Antón Pérez, Andrés Ramírez, Andrés Morín, Antón Sánchez de Guadalupe, Pedro Ximénez y Luis Hernández.
[20] En la misma colección hay otra obra suya: la Virgen de la Leche.
[24] En el Instituto Jovellanos de Gijón había otro dibujo del Crucificado realizado por este autor, pero fue destruido en 1936.
[34] Se conserva su autorretrato, de hacia 1550, incorporado al Museo del Prado en 2019.