Sus indagaciones elementales se centran en la percepción extrasensorial, telepatía, precognición, clarividencia, psicoquinesis, psicometría, sincronicidad, etc. Asevera que tales prodigios son una condición latente del ser humano, que descubre paulatinamente conforme al conocimiento de sí mismo y el entorno.Sus detractores refutan a las supuestas manifestaciones 'paranormales' como una expresión de eventos naturales acordes a las variables de la física, que al ser infrecuentes, se los interpreta erróneamente con un sesgo ideológico para afirmar las creencias supersticiosas.Así mismo, niegan que las facultades 'superlativas' como la telepatía o la precognición sean dominios del hombre, ya que de ser posible realizar operaciones de tal magnitud, demandarían altos recursos energéticos para un órgano tan especializado como el cerebro, mediante un sustrato neurofisiológico que debería ser muy evidente ante los estímulos, y sin embargo, los escaneos no emiten procesamientos de este carácter.(memoria, pensamiento, emociones, etc.)[10] [13] Desde las últimas décadas, fenómenos inusuales como las experiencias cercanas a la muerte, la hipnosis, el efecto placebo, el Síndrome de Savant, etc., han generado un creciente interés y se los describen con mayor frecuencia en la literatura médica, ya que parecen violar los principios de la biología y exponen serias dudas acerca de los sistemas implicados.[14] El eminente cirujano español Manuel Sans Segarra resultaría atentado por su propia racionalidad tras el testimonio de un paciente, que estando en muerte clínica, atravesó una Experiencia cercana a la muerte y posterior a ser reanimado, dio detalles exactos de lo sucedido en la sala de reanimación, dejando estupefacto a los médicos presentes, ya que no tenía signos vitales para poder registrar el suceso.Desde entonces, Segarra documentaría cinco casos más y encontraría respuestas para estos eventos en la física cuántica: El psicólogo y neurocientífico mexicano Jacobo Grinberg, en su teoría sintérgica sostuvo: El psiquiatra y psicólogo suizo Carl Gustav Jung, junto al Nobel de física austríaco Wolfgang Pauli, teorizaron acerca de aquellos eventos que ignoran la relación causa-efecto con el término sincronicidad: La parapsicología alega que estos fenómenos responden a una naturaleza psíquica vinculada pero no sujeta al espacio–tiempo del hombre, cuyo potencial latente le es aún desconocido en su estadio evolutivo actual, aunque los irá develando progresivamente para poder asimilarlos.[11][12] La palabra «parapsicología» fue acuñada por primera vez por el psicólogo, teórico de la estética y filósofo alemán Max Dessoir (1867-1947) en junio de 1889 en un artículo publicado en la revista alemana Sphinx: El término proviene del griego para: ‘junto a’, psico: ‘mente’ y logía: ‘estudio’).[17] En 1882, William Barret y Jules Romanes fundaron en Londres la Society for Psychical Research (Sociedad para la Investigación Psíquica) con el propósito de investigar «una gran cantidad de fenómenos designados por términos como hipnótico, psíquico y espiritualístico».Con esta técnica pretendía ejercer un influjo terapéutico sobre sus pacientes con una finalidad de curación, utilizando un medio etéreo llamado «pase magnético», que no era sino la antesala de lo que más tarde llamaríamos hipnosis, estudiada y desarrollada más ampliamente en 1842 por el neurocirujano James Braid, que publicaría al año siguiente Neurypnology: or the rationale of nervous sleep, donde la calificaba de «sueño nervioso».James Braid, no obstante, consideraba incorrecta la hipótesis de que el pase magnético era un fluido etéreo.En Europa del este y la actual Rusia las investigaciones se centraron en la hipnosis y la telepatía, fundamentalmente de la mano del fisiólogo Leonid Leonidovich Vasiliev (1891-1966),[20] que intentó demostrar que la hipnosis era producida por la irradiación de las «ondas cerebrales», sin obtener resultado.En 1639, un siglo antes que Anton Mesmer, se publicó en Europa un libro titulado The sympathetical powder of Edricius Mohynus of Eburo (el polvo simpático de Edricius Mohynus de Eburo), que explicaba cómo las heridas podían ser supuestamente curadas sin contacto con ellas, a distancia y mediante la «facultad directiva y la virtud» que podría aportar la virtud del «polvo simpático» en una toalla o servilleta con sangre.Para él las hermanas Fox (1847) habrían anunciado la llegada del espiritismo como hoy lo conocemos, y con él nuevas prácticas y formas de estudio que habrían resultado una evolución radical en la historia de la parapsicología.[cita requerida] Edgar Mauer, en su libro Of spots before the eyes (1952), argumenta que muchos fenómenos visuales tienen explicación física dentro del propio ojo.Existe, según numerosos estudios, la psicosis inducida por estimulantes, entre los que se destacan las anfetaminas, la cocaína y en menor medida, la cafeína.La estructura de las construcciones humanas y la geología del lugar afectan indudablemente a determinada casuística.[34] Esta teoría ha sido corroborada sin mucho éxito fuera del mundo científico, relacionándola generalmente con la presencia de agua, utilizando técnicas pseudocientíficas, como la radiestesia.Fuera de esto no utiliza el método científico, aunque utilice ocasionalmente metodologías experimentales.El psi es una entidad creada para intentar comprender la supuesta mecánica de los fenómenos parapsicológicos, entre los que se incluirían la percepción extrasensorial, la telepatía, la clarividencia, la precognición, la psicoquinesis, los poltergeist, las experiencias cercanas a la muerte, la mediumnidad, las experiencias extracorpóreas o la sanación milagrosa.En todo caso y fuera de la educación reglada, existen ciertas instituciones que imparten formación en parapsicología.Hasta la fecha, la parapsicología no ha producido ninguna teoría de este tipo, por lo que en su estado actual es considerada una disciplina pseudocientífica.a quien consiga, bajo condiciones controladas de laboratorio (y supervisadas por la fundación), demostrar un solo fenómeno paranormal como los anteriormente mencionados.para la misma finalidad, posteriormente ha aumentado ese importe a 10 000 dólares de EE. UU.Los requisitos para reclamar este premio no son triviales; los precandidatos deben pasar una prueba preliminar (que tiene menor importancia que la prueba formal) para filtrar a candidatos supuestamente prometedores de meros charlatanes.
La Rectoría de Borley vista desde el jardín. Considerada una de las casas más «encantadas» de la historia.
El escéptico ilusionista
James Randi
prometió una alta suma de dinero a quien demostrase una evidencia creíble de la existencia de lo paranormal.
Muestra cada universo como una de las tiras, y cada fotograma como un
cuanto
de tiempo, ahí vemos los fotogramas ser paralelos los unos con los otros mostrando las diversas posibilidades coexistiendo paralelamente. Cada tira correspondería a un universo. Aunque el gráfico muestra ilustrativamente solo dos universos, en teoría habría tantos universos como posibilidades de cambio.
Aquí se muestran orbes durante lluvia. Las partículas involucradas son las propias gotas de agua, y el flash, el elemento que media en el fenómeno.