Melquíades

[5]​ Melquíades y su sucesor, Silvestre I, formaban parte del clero más cercano al papa Marcelino.[7]​ En abril del 311, el emperador romano Galerio emitió el Edicto de Tolerancia de Sárdica, poniendo fin oficialmente a la persecución del cristianismo.[11]​ El Liber Pontificalis, atribuyó la introducción de varias costumbres posteriores a Melquíades, como no ayunar los jueves ni los domingos, aunque los estudios posteriores ahora creen que las costumbres probablemente son anteriores a su pontificado.En consecuencia, los cristianos no solo lograron la libertad de culto, sino que también se restauraron todos los lugares de culto y se devolvieron todos los bienes confiscados.[17]​ Constantino estuvo de acuerdo y encargó al papa, junto con tres obispos galos, que resolvieran la disputa.[17]​ Así pues, el Concilio terminó después de sólo tres sesiones.[6]​[18]​ Los fallos adversos no lograron detener la continua expansión del donatismo en el norte de África.Cuando se convocó aquel concilio, Melquíades había muerto el 10 u 11 de enero del 314.