[4] En 1736, a los seis años, entró en la Escolanía de Montserrat donde comenzó sus estudios de música y órgano, al igual que haría el guitarrista y compositor español Fernando Sor.
Más tarde ingresó como monje en la Orden de San Jerónimo y finalmente se consagraría como sacerdote en 1752 —razón por la que se le conoce como el "Padre Soler".
Aquí enseñó y actuó como primer organista, componiendo la música para los oficios.
En el monasterio continuó sus sonatas para clave, además de incursionar en otros géneros como el concierto, obras para órgano, villancicos y música sacra, incluyendo importantes misas.
Se le considera un maestro de la música barroca española, su espíritu, carácter y marcada personalidad pintan el paisaje de la música española del siglo XVIII.