Obertura de Guillermo Tell

[3]​ La obertura se puntúa para: un flautín, una flauta, dos oboes (primer o segundo oboe doble o corno inglés), dos clarinetes en La, dos fagotes, cuatro cornos franceses en Sol y Mi, dos trompetas en Mi, tres trombones, timbales, triángulo, bombo, platillos y sección de cuerdas.[4]​ Héctor Berlioz, quien generalmente detestaba las obras de Rossini, la describió como "una sinfonía en cuatro partes".Una tormenta inminente es insinuada por dos redobles de timbales muy silenciosos que se asemejan a un trueno distante.El volumen y la cantidad de instrumentos disminuyen gradualmente a medida que amaina la tormenta.El corno inglés luego toca en frases alternas con la flauta, culminando en un dúo con el triángulo que los acompaña de fondo.[6]​ La melodía aparece varias veces en la ópera, incluido el acto final, y adquiere el carácter de leitmotiv.Este segmento se utiliza a menudo en dibujos animados para indicar el amanecer, sobre todo en The Old Mill de Walt Disney.[8]​ Final: Marcha de los soldados suizos El final, a menudo llamado la "Marcha de los soldados suizos" en inglés, es en Mi mayor como el preludio, pero es un galope ultra dinámico anunciado por trompetas y tocado por la orquesta completa.Su uso más famoso a ese respecto es como sintonía de El Llanero Solitario; ese uso se ha vuelto tan famoso que el término "intelectual" se ha definido como "un hombre que puede escuchar la Obertura de Guillermo Tell sin pensar en el Llanero Solitario".[10]​ El final es citado por Johann Strauss Sr. en William Tell Galop (Op.29b), publicado y estrenado meses después del estreno en París del original,[11]​ y por Dmitri Shostakovich en el primer movimiento de su Sinfonía n. ° 15.[13]​ También se ha utilizado en dibujos animados que parodian música clásica (por ejemplo, Obertura al Desastre de Bugs Bunny, en el que el final de la obertura es interpretado por el Pato Lucas y el Puerco Porky) o westerns (por ejemplo, Bugs Bunny vuelve a montar).
Rossini retratado en 1828, año en que comenzó a componer Guillermo Tell.