Este movimiento se relaciona directamente con los planteamientos de la Bauhaus.
Considera la fotografía como una práctica artística autónoma con sus propias leyes de composición e iluminación; en consecuencia el objetivo de la cámara se convierte en un segundo ojo para poder mirar el mundo.
La creatividad se observa más desarrollada en los temas que aborda y en la nueva interpretación dada a la toma fotográfica.
[3] De hecho autores como Lazlo Moholy-Nagy emigraron a Estados Unidos poco después.
La selección de autores fue obra de diversos artistas, mientras Moholy-Nagy participó en la de fotógrafos europeos, Edward Weston se encargó de los americanos, entre otros estuvieron Berenice Abbott, Willi Baumeister, Marcel Duchamp, Hannah Höch, Eugène Atget, Man Ray, Alexander Rodtschenko, Edward Steichen, Imogen Cunningham, Charles Sheeler, Brett Weston, etc.[4] Sin embargo, los trabajos elegidos destacaban por sus encuadres sorprendentes, como las fotos tomadas mientras caía en paracaídas por Willi Ruge, la utilización del fotomontaje, etc.