Estos motores fueron producidos para el mercado americano en la planta de motores que Ford posee en Dearborn, Michigan, mientras que para el mercado europeo fue establecida una nueva planta en la localidad de Bridgend, en Gales.
Sus válvulas fueron montadas en un ángulo compuesto con relación a sus cámaras de combustión hemisféricas, aunque en algunas versiones las cámaras fueron alteradas para aumentar las turbulencias en el flujo de combustible.
En su última etapa de producción, fue utilizado por el Ford Focus entre 2000 y 2004, siendo conocido simplemente como Split Port.
Es por esto que estos impulsores no tardaron mucho en ser objeto de pruebas en la industria del desarrollo de alto rendimiento, siendo la versión 1.6 L protagonista incondicional en este escenario durante las décadas del '80 y '90, llegando a recibir ajustes que le permitían exprimir un aumento significativo en su potencia de salida, aproximadamente más de 200 PS (149 kW), llegando su punto máximo en las versiones turbocargadas.
La versión CVH 1.3 L fue la versión que sucedió a la 1.1 L, siendo inaugurada su producción en el año 1983 y aplicado a los modelos Escort europeo, Orion y Fiesta.