Sin embargo, durante el siglo XX, sufrió importante remodelaciones usando hormigón armado y vigas de acero, por lo cual actualmente no se puede considerar una estructura exclusivamente en albañilería.
Encima, a una altura que va de los cuarenta a los ochenta metros, se eleva la gran cúpula, de base cuadrada, caracterizada por su forma alargada, construida con paredes convexas en albañilería autoportante.
Se encuentra aproximadamente a la mitad de la altura del edificio, y se puede acceder a él mediante un ascensor sin guías fijas (sustituidas por gruesos cables de acero) situado exactamente en el centro del atrio que hay debajo, que ofrece a los visitantes una panorámica del interior de la cúpula.
Esta última parte, actualmente inaccesible para los turistas, está constituida por diez terrazas circulares, que se van haciendo más pequeñas a medida que se asciende: la primera, de ocho columnas, hace de techo de la linterna, y en ella empieza otra columnata parecida, ligeramente más pequeña, que termina en la segunda terraza.
La comunidad judía turinesa compró un terreno en la zona llamada en la época Contrada del cannon d'oro (actual Via Montebello) para construir un nuevo templo con una escuela anexa.
[3] Pese a los excelentes trabajos del elegante pronaos y la extravagante cúpula de base cuadrada, realizados en tan solo seis años, la elección de Antonelli como arquitecto se mostró pronto insatisfactoria para la comunidad judía.
Desde su construcción, el edificio sufrió de problemas estructurales, debido la superficie relativamente reducida de la base y el enorme peso que tenía que soportar.
En realidad, pese a que ese año las obras estaban todavía en curso, un pequeño globo aerostático Luis Godard, que partía de la cercana Piazza Vittorio Veneto, ofrecía un viaje a la cima del edificio para ver las obras desde cerca al módico precio de cinco liras.
Sin embargo, este globo, llamado Italo, fue destruido, en tierra y sin víctimas, por un rayo el 28 de abril de 1888, y sustituido poco tiempo después por su sucesor, el Nouveau Italo.
Esta aguja tiene diez terrazas circulares, las dos primeras de las cuales están dotadas todavía de columnata, y posteriormente se hacen cada vez más pequeñas según se asciende.
Perdió este récord en 1953, cuando la aguja original se derrumbó, y fue reconstruida en hormigón armado.
Sin embargo, los turineses confundieron la estatua del genio alado en la cima con la de un ángel.
La nueva estructura cubrió, en buena parte, el muro original de ladrillos y las varias decoraciones.
La nueva estrella se reforzó respecto a la primera, constituida por una aleación metálica de acero-aluminio.
También se añadió una pequeña instalación eléctrica contra los rayos pocos años después.
El nuevo proyecto de iluminación nocturna fue realizado por el ingeniero Guido Chiarelli, incluida la colocación de dos luces rojas en la cima, justo bajo la estrella, que todavía se mantienen.
Si el primer ascensor interior fue construido en 1964, en 1987, año del final de la remodelación del edificio, se construyó un segundo ascensor, activo hasta 1996, cuando la Mole fue transformada en una sede museística permanente.
En 2011, con ocasión del 150.º aniversario de la unificación italiana, se colocó un tricolor italiano iluminado, constituido por tres cuadrados verde, blanco y rojo, inmediatamente sobre el templete, diseñado por Italo Lupi, Ico Migliore y Mara Servetto.
En años más recientes, la Mole es iluminada esporádicamente con luces proyectadas de diferentes colores, según la ocasión.