La actividad minera en Capillitas fue un proceso discontinuo que se inició en la época prehispánica, luego se retomó hacia el siglo XVII, cobrando nuevo impulso hacia mitad del siglo XIX, alternando hasta el presente etapas de operación y cierre temporal.
[2] Se trata de mineralización epitermal relacionada con vulcanismo mioceno-plioceno alojada en granito paleozoico.
Durante siglos la zona de mineralización fue explotada por sus recursos metalíferos, oro y posteriormente cobre en menor escala, hasta que hacia fines del siglo XIX, se comenzó a extraer rodocrosita, una piedra semipreciosa de gran valor ornamental.
Los minerales primarios más representados son: pirita, esfalerita, galena, calcopirita, marcasita, pirrotina, tennantita, enargita, bornita, estannita y oro.”[3] Las vetas principales son la "Capillitas", "Carmelitas", "La Rosario", "Ortiz", "Restauradora" y "25 de Mayo".
[11] Si bien en muchas oportunidades la rodocrosita fue llamada “piedra nacional”, esta denominación no estaba avalada por ninguna disposición emanada de los ámbitos correspondientes.
[12] La variedad “Ortiz”, proveniente de la veta del mismo nombre, es la más apreciada por su intenso color frambuesa y su aspecto translúcido.