Matías Laborda Ibarra
[4] Años más tarde fue nuevamente partícipe de un nuevo golpe militar para derrocar al presidente Arturo Illia, quienes a nivel nacional se designa presidente a Juan Carlos Onganía, quien no manejaba nada de política, ni siquiera quienes lo acompañaban en el gobierno, ya que se trataba más bien de gente relacionada con empresas, de tendencia nacionalista y conservadora.[5] La Junta militar gobernante envían al interventor Eduardo Federik para asumir la gobernación de la provincia de San Luis derrocando al gobernador Santiago Besso, para instaurar el nuevo régimen, esta vez no solo proscribiendo al peronismo sino también eliminando toda idea de política, como así también a quienes la sostengan.[6] El Coronel Ibarra, asume el gobierno provincial en una época donde el Estado Nacional estaba acostumbrado a intervenir provincias por la fuerza y sin elección electoral.[8] Surgen distintos grupos de izquierda opuestos al gobierno militar destinadas a resistir y luchar contra el totalitarismo estatal, pues luchan activamente contra la ilegalidad ante la falta de un régimen democrático que permita la participación y otorgue eficientes soluciones a los agravados conflictos, pero algunos grupos de una manera particular: ahora eran agrupaciones armadas.Al contrario, termina en malas relaciones con la Junta de Comandantes y con sectores capitalistas poderosos.